¿Cuál es el país más pobre de Latinoamérica 2022?

A inicios de abril, la Comisión Económica para América Latina CEPAL publicó el Anuario Estadístico de América Latina y el Caribe. Allí caracterizó la situación sociodemográfica, económica y medioambiental de los 46 Estados integrantes en los distintos periodos analizados.

Como una parte de su nota propedéutica, la organización en todo el mundo aclaró que los datos del Anuario se calcularon "usando metodologías y estándares de todo el mundo, para asegurar la comparabilidad entre países". En consecuencia, los valores no siempre encajan con los datos nacionales.

Haití, el país mucho más pobre de América

La situacion de Haití es singularmente especial. Se calcula que el 80% de la población del país vive en la pobreza. Pese a recibir enormes proporciones de asistencia todos los años de los USA, Canadá y la Unión Europea, la economía nacional está poderosamente gravada por el campo agrícola. Cerca del 70% de los haitianos dependen únicamente de la agricultura.

Otro aspecto esencial que frena el desarrollo del país es la fuga de cerebros. Mucho más del 80% de la población con prominente nivel educativo ha migrado fuera del país en pos de ocasiones.

Pobreza en América Latina, país por país

Según esta medición, ¿cuáles son los países mucho más pobres de América Latina?

Honduras, Colombia y Ecuador registran porcentajes del 49%, 29,4% y 25,4% respectivamente de su población bajo el umbral de US$5,50 diarios y según los últimos datos de 2019. No, hay datos oficiales recientes de Cuba, Nicaragua, Venezuela -donde estimaciones privadas charlan de un 94,5% de pobreza- y Guatemala.

¿De qué manera cambia el nivel de protección popular en la zona de un país a otro?

Estos son ciertos descubrimientos clave:

• Varios sistemas de pensión proponen provecho bajos. Los valores mucho más altos son los de El Salvador, Paraguay, Colombia, Uruguay y Brasil, donde las pensiones representan mucho más del 50% de los sueldos medios.

EL SECTOR PRIVADO PUEDE ACELERAR EL CRECIMIENTO

Añade que alta dependencia de la agricultura, prominente nivel de informalidad en todos y cada uno de los ámbitos, alta puerta de inseguridad a choques externos, incluyendo los catastrofes naturales, conjuntado con alta delincuencia y los índices de crueldad, la inestabilidad a nivel político y un tiempo político y económico enclenque, el desarrollo económico se está desacelerando y conservando la pobreza estructural en Honduras.

"La fuerte inversión extranjera llevó a efectos de contagio intersectorial limitados, al paso que la administración ineficiente de la inversión pública y los rigurosos requisitos regulatorios limitan el avance de novedosas ocasiones económicas", destaca.